martes, 12 de octubre de 2010

Más sobre nuestr@s artistas


Ballet Maldito Folk Urbano

Maldito Folk Urbano es una compañía de danza-teatro formada en 2007 que utiliza el “movimiento como motor principal” y que intenta generar un espacio creativo abierto a la exploración de las expresiones artísticas populares. Se trata de una experiencia de arte escénico en la que “las piezas que componen cada performance están armónicamente pensadas como un todo”. “Me parece muy interesante que exista un festival que promueva el arte de los chicos y además que sea de Esteban Echeverría, lugar en donde me formé”, opinó Ernesto Bechara, productor del ballet.

Leandro Mac Garva, profesor de fotografía de alumnos del Centro Cultural Moliere y el Estudio-Taller

Una de las novedades que traerá les festival será la exposición de fotografías de los talleres que dicta Leandro Mac Garva. Cuatro jóvenes de entre 14 y 19 años elegirán dos fotografías cada uno de las que tomaron durante el año. “Ellos se engancharon enseguida con la propuesta y están muy contentos de que los hayan invitado, ya que nunca antes expusieron sus fotos”, destacó Mac Garva, profesor en el Centro Cultural Moliere y el Estudio-Taller. El taller apunta primeramente a la expresión artística: “El primer año trabajamos el uso de la cámara y la composición, basado en la fotografía artística”, explicó el docente y aclaró: “Después, ellos deciden para qué lado ir: si les gustan retratar paisajes o fotografía periodística”.

Alondras para espejos, proyectará un corto documental en Arte Joven 2010 Esteban Echeverría.

Alondras para espejos es un cineclub documental creado en 2008 por un grupo de jóvenes de Burzaco que utiliza el lenguaje audiovisual para dar a conocer realidades ocultas o banalizadas por el cine oficial y los grandes medios de comunicación. Educación popular, pueblos originarios, problemáticas de género y desaparecidos en democracia fueron algunos de los temas que difundieron a través de realizaciones de directores argentinos, latinoamericanos y europeos. Después de cada proyección, que siempre es libre y gratuita, la intención es que se genera un debate. “Tratamos de crear un espacio para compartir y formar otra mirada que incluya todas las cosas que pasan”, detalló Guillermo Gugliotti, uno de los creadores.

De los motores que permite que el cineclub se mantenga en pie se destaca la interrelación entre los vecinos del barrio y las organizaciones culturales y comunitarias de la zona sur del Conurbano bonaerense. Es que el proyecto admite la participación de todos los que quieran sumarse. “Nos parece necesaria la construcción de espacios en donde poder compartir esa aventura del arte, donde brindar esa oportunidad y acercar esa invitación, para que todos podamos darnos cuenta que si no hay ningún componente cultural ni comunitario en nuestras vidas nos estamos perdiendo de mucho”, opinó Gugliotti y agregó: “Reivindicamos el invaluable rol que tiene el arte para formar a una persona. Y lo entendemos como una herramienta de cambio, como transmisor de valores, como educador; por la sencilla razón de que no se impone, y casi sin proponérselo nos enfrenta con nosotros mismos y con nuestra actitud frente al mundo”. Con su participación, será la primera vez que AJEE ofrecerá cine como realización artística en el marco del Festival.

Sres. periodistas: En caso de estar interesados en contactar a los hacedores culturales que participarán de la actividad, por favor comuníquese a los teléfonos de prensa y organización que figuran al final de este correo. Gracias. AJEE.

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